Max Moreau
Nace en 1902 en Soignies, una pequea ciudad belga que abandona a los tres años para ir con sus padres a vivir a Bruselas. Confiesa una profunda admiración por su padre, pintor, al que contemplaba durante su trabajo, haciendo por ello de su aprendizaje un gesto inconsciente y espontáneo. Ya con doce años dibujaba con gran precisión del natural ante la mirada sorprendida del padre que veía cómo, pocos años después, su hijo Max pintaba al óleo sin haber pisado jamás una escuela de Bellas Artes.
Esta Facilidad ingénita del joven Moreau determina que su padre adopte el papel de guía y maestro en su primeras experiencias con el arte. Acompasaba el estudio con la realización de copias y exégesis de los grandes maestros del pasado, contenidos en el Museo de Bruselas, y con retratos a personajes de la farándula de su ciudad, trazados entre bastidores a lo largo de las representaciones teatrales.
Acaba la Primera Guerra Mundial y la familia Moreau se traslada a París. Max continua el trabajo en los teatros parisimos, especialmente en aquellos que recreaban obras de la Comedia Francesa.
Un nueva estapa de su vida viene marcada por el atractivo que siente hacia Oriente. Lo pintoresco de los paisajes contemplados en fotografías y cuadros de colegas, las posibilidades pictóricas imaginadas y el deslumbramiento para el artista que viaja al país hasta en cinco ocasiones en los siguientes diez años. El Mediodía francés lo acogerá durante la Segunda Guerra Muncial, época en la que continua haciendo innumerables retratos.
Marraquech resulta un verdadero focode senaciones para el pintor. Las tiendas de souvenirs, el sol deslumbrante, los olores, la belleza humana contenida en la plaza Djemen-el-Fra, lo sorpresivo, lo fantástico... para Moreau constituye un tesoro para los sentidos. Allí retrata a numerosas personalidades con las que entabló amistad.
Finalmente, tras quice años de permanencia en la capital francesa y muchos viajes al extranjero (Bahamas, América del Norte, Vichy, Portugal, ...), la familia Moreau se asienta en Granada, ciudad que como el mismo artista reconoce: "no nos ha defraudado en los más de diez años que vivimos aquí. En ella me he hecho reconocer y apreciar, creo". Innumerables exposiciones, premios y reconocimientos continúan avalando su trayectoria artística hasta nuestros días con el nombramiento de Hijo Adoptivo de la Ciudad de Granada.
Sala de Exposición de Pinturas |
Colección de muñecas de China |
Piano
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Máscaras Chinas |
Patio inferior |
Vistas de la Alhambra desde el Patio inferior |
Chimenea |
Patio inferior desde arriba |
Patio superior |