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El Ayuntamiento pide la colaboración ciudadana para evitar que la ciudad esté empapelada de octavillas
Los operarios pierden diariamente una media de un 2.5 % de su tiempo en la retirada de estos carteles
El incremento indiscriminado de octavillas en el mobiliario urbano de la capital ha llevado al área de Medio Ambiente y Mantenimiento ha realizar un llamamiento a la colaboración ciudadana para evitar “que la ciudad amanezca día tras día empapelada de octavillas con anuncios ciudadanos”.
El edil de Medio Ambiente y Mantenimiento, Juan Antonio Mérida, explicó que especialmente en estas fechas, previas a la vuelta al curso universitario, “ la ciudad es inundada de anuncios de alquileres de pisos especialmente, lo que supone un incremento del trabajo de los servicios de limpieza, que deben perder el tiempo en retirar los papeles que encuentran pegados a todo tipo de mobiliario urbano, especialmente en cabinas de teléfono, marquesinas y farolas”.
De esta forma, Inagra se ha visto obliga a facilitar a sus operarios de limpieza un “cutter” con el que poder despegar los folios de papel que se encuentran pegados al mobiliario de la ciudad , “o que supone dejar de barrer las calles para dedicarse a realizar una actividad consecuencia de actitudes incívicas de algunos ciudadanos.
Inagra calcula que los operarios pierden diariamente una media de un 2.5 % de su tiempo, unos 10 minutos, lo que supone un total de 1.100 jornadas anuales equivalentes de las dedicadas a la limpieza de la ciudad y coste aproximado a 230.000 €, lo que da una idea de la importancia de la recogida de estos desechos.
La llamada a la colaboración ciudadana tiene por objetivo el mantener la ciudad lo más limpia posible, evitando la sensación de suciedad que provoca las octavillas en las calles de Granada y a su vez conseguir un servicio de limpieza más optimizado.
Creemos que, por un lado, en el interior de los centros de trabajo y de estudio existen soportes suficientes para publicitar las ofertas que habitualmente se ven en los carteles callejeros; por otro lado, en la era informática que vivimos podemos encontrar diversas posibilidades para ofertar los servicios sin necesidad de afear el aspecto de la ciudad, concluyó.